Tras el hallazgo de los restos de tres urnas funerarias iberas en Castellón, los expertos apuntan a la posibilidad de hallar el asentamiento que dio origen a esta necrópolis. El arqueólogo responsable de la empresa que lleva a cabo los trabajos, Alfonso Joaquín, explica que "es fácil pensar que en las cercanías de esta zona se pudiera hallar el poblado de donde procedían los difuntos".La experiencia en otros yacimientos de la provincia avala esta teoría. Además, publicaciones de expertos en la materia como Porcar o Esteve, en los años 20 ó 60, ya hablan de todos los vestigios iberos de este área próxima a la zona costera castellonense.
Por su parte, la Conselleria de Cultura, actual responsable de estos trabajos cuyo primer hallazgo fue fruto de la casualidad, se mantiene a la espera del informe preliminar sobre los hallazgos en este emplazamiento próximo a las obras en el encauzamiento del barranco de Fraga. Este estudio estará listo en el periodo de un mes y medio.
NÚCLEO
Al preguntarle sobre los proyectos futuros o el trato que se le dispensará al que es el tercer núcleo de origen ibero del términos de Castellón (junto a los restos del Castell Vell de la Magdalena y el Pujol de Gasset, en las proximidades del Grao) se muestra prudente, aunque sin descartar ninguna vía posible.
Portavoces autorizados de la Dirección General de Patrimonio afirman que "no hay hallazgos arqueológicos más importantes que otros, pero, desde luego, una necrópolis ibera siempre es un descubrimiento de gran entidad. Pero la importancia no se sabrá hasta que no se concluya la excavación y el estudio pertinente". Así, señalan que tras ser informados del hallazgo "ya se ha decidido que se realice una excavación en extensión de toda la zona. Una vez concluida y con el informe final en la mano, se determinará el siguiente paso".
LAS URNAS
Respecto a los tres hallazgos más importantes, los recipientes con los restos mortuorios se encuentran conservadas en el Museu de Belles Arts de Castelló, ya que, como afirma Joaquín, "pese a que ahora aún hay que excavar en el interior de las urnas para conocer al detalle su contenido y saber si junto a las cenizas hay también otros objetos, las he llevado al Museo para asegurar su conservación".
El arqueólogo y responsable de este servicio, Arturo Oliver, manifiesta que "no es una sorpresa el descubrimiento teniendo en cuenta el emplazamiento". Sin embargo, mientras custodia de manera celeso en el Museu de Belles Arts los fragmentos de tierra que contienen restos de metal propio de la epoca ibera y las vasijas con las cenizas, se muestra comedido respecto a lo que su posterior estudio en detalle pueda aportar.
Fuente: El Periódico
Fecha: 18/06/2009
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