En 1991 se descubrieron las tumbas de las sacerdotisas. Allí se hallaron un ajuar funerario provisto de decenas de cerámicas y un ataúd decorado con enormes placas de cobre.
500 contextos funerarios se han hallado en San José de Moro en los 18 años de trabajos que ha realizado la PUCP.
De San José de Moro mucha gente habla, pero pocos lo conocen. Ubicado a cinco kilómetros al norte de Chepén, en La Libertad, este sitio arqueológico fue un cementerio y centro ceremonial que tuvo una ocupación de mil años continuos (entre el 400 d.C. y el 1400 d.C.), desde el período Mochica hasta el Chimú. De ahí su importancia, ya que en sus 150 hectáreas de extensión se hallaron en los últimos años varios vestigios y contextos funerarios. Este fue el caso de las denominadas sacerdotisas, con las que se revela el rol de las mujeres en los rituales.
A los hallazgos realizados en esa importante zona se sumó, hace solo tres semanas, el desentierro de las osamentas de cinco individuos que habrían pertenecido a las clases media y alta de la cultura Mochica. Este nuevo descubrimiento fue hecho por un grupo de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), encabezado por el arqueólogo Luis Jaime Castillo, y apoyado por estudiantes de distintos países como EE.UU., Bélgica, México, Colombia, India, Inglaterra y España.
El arqueólogo responsable de las excavaciones, Luis Armando Muro, explicó que los contextos funerarios pertenecen al período Mochica Medio y Tardío, alrededor del año 600 d.C., y en su interior se hallaron valiosas cerámicas de la cultura Mochica, además de varias "pailas" de 150 litros en las que se preparaba y almacenaba la chicha. También se encontraron ollas, cántaros y algunos objetos de metal.
“Hemos encontrado cinco individuos de diversas edades, entre adultos y niños, que podrían haber pertenecido a las clases media y alta, aunque aún estamos investigando. Es muy recurrente encontrar niños, ya sea por una cuestión de enterrarlos con sus familiares o porque el índice de mortandad era muy alto en la época de los mochicas por las epidemias y el fenómeno de "El Niño", sostuvo el investigador.
En referencia a las cerámicas halladas, sostuvo que son vasijas de asa estribo, catalogadas como de decoración fina del período Mochica Tardío, de iconografía singular relacionada a temas religiosos y que fueron hechas con influencia de la cultura Wari.
Armando Muro explicó que los restos encontrados son examinados por especialistas en el tema de bioarqueología, de tal manera que se pueda saber a través de sus huesos, por ejemplo, un poco más sobre su anatomía, su sexo y el porqué de su muerte.
"Este fue un lugar importante y, lamentablemente, no muchos lo conocen. Quisiéramos convertir este recinto en un espacio que se pueda visitar, con un museo de sitio para exponer los hallazgos hechos, pero eso se hará poco a poco. Ya estamos armando ese proyecto que se deberá hacer con la ayuda de todos", precisó.
Fuente: Norte
Fecha: 02/08/2010
500 contextos funerarios se han hallado en San José de Moro en los 18 años de trabajos que ha realizado la PUCP.
De San José de Moro mucha gente habla, pero pocos lo conocen. Ubicado a cinco kilómetros al norte de Chepén, en La Libertad, este sitio arqueológico fue un cementerio y centro ceremonial que tuvo una ocupación de mil años continuos (entre el 400 d.C. y el 1400 d.C.), desde el período Mochica hasta el Chimú. De ahí su importancia, ya que en sus 150 hectáreas de extensión se hallaron en los últimos años varios vestigios y contextos funerarios. Este fue el caso de las denominadas sacerdotisas, con las que se revela el rol de las mujeres en los rituales.
A los hallazgos realizados en esa importante zona se sumó, hace solo tres semanas, el desentierro de las osamentas de cinco individuos que habrían pertenecido a las clases media y alta de la cultura Mochica. Este nuevo descubrimiento fue hecho por un grupo de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), encabezado por el arqueólogo Luis Jaime Castillo, y apoyado por estudiantes de distintos países como EE.UU., Bélgica, México, Colombia, India, Inglaterra y España.
El arqueólogo responsable de las excavaciones, Luis Armando Muro, explicó que los contextos funerarios pertenecen al período Mochica Medio y Tardío, alrededor del año 600 d.C., y en su interior se hallaron valiosas cerámicas de la cultura Mochica, además de varias "pailas" de 150 litros en las que se preparaba y almacenaba la chicha. También se encontraron ollas, cántaros y algunos objetos de metal.
“Hemos encontrado cinco individuos de diversas edades, entre adultos y niños, que podrían haber pertenecido a las clases media y alta, aunque aún estamos investigando. Es muy recurrente encontrar niños, ya sea por una cuestión de enterrarlos con sus familiares o porque el índice de mortandad era muy alto en la época de los mochicas por las epidemias y el fenómeno de "El Niño", sostuvo el investigador.
En referencia a las cerámicas halladas, sostuvo que son vasijas de asa estribo, catalogadas como de decoración fina del período Mochica Tardío, de iconografía singular relacionada a temas religiosos y que fueron hechas con influencia de la cultura Wari.
Armando Muro explicó que los restos encontrados son examinados por especialistas en el tema de bioarqueología, de tal manera que se pueda saber a través de sus huesos, por ejemplo, un poco más sobre su anatomía, su sexo y el porqué de su muerte.
"Este fue un lugar importante y, lamentablemente, no muchos lo conocen. Quisiéramos convertir este recinto en un espacio que se pueda visitar, con un museo de sitio para exponer los hallazgos hechos, pero eso se hará poco a poco. Ya estamos armando ese proyecto que se deberá hacer con la ayuda de todos", precisó.
Fuente: Norte
Fecha: 02/08/2010
No hay comentarios:
Publicar un comentario