El estudio de la caracterización antropológica de los godos, a través del análisis de los restos esqueléticos de unas cuarenta necrópolis españolas, a las que se unirán otras en Francia e Italia, es el objetivo del trabajo que desarrolla el antropólogo riojano Julio Martínez Flórez.
Martínez Flórez, con el apoyo del Museo de La Rioja y de la Cátedra de Historia Antigua de la Universidad riojana, inició este trabajo hace un par de años, que prevé completarlo a lo largo de otros ocho y que consiste en estudiar las características antropológicas de los pueblos germánicos que entraron en España, que fueron, fundamentalmente, los visigodos.
Este antropólogo e historiador, en declaraciones a EFE, ha añadido que, para ello, hay que comprender el origen del pueblo godo, su migración del Danubio hasta el Mar Negro a través de Grecia, Italia, Francia y España; así como sus estructuras demográficas en los cuatro reinos que configuró en tierras rusas, italianas, francesas y españolas.
Ha destacado que el análisis antropológico de los restos esqueléticos encontrados en las necrópolis visigodas existentes en España, Francia e Italia y el estudio de los conjuntos cementeriales permitirá desarrollar una hipótesis de trabajo para llenar algunas "lagunas históricas" que existen sobre el pueblo visigodo.
Para el desarrollo de este trabajo ya se han establecido contactos de colaboraciones con las comunidades de Castilla y León, Madrid, Aragón, Cataluña y La Rioja; así como con diversos museos y universidades de España, Francia e Italia.
Esta investigación se enfrenta a la dispersión geográfica de los territorios que sirvieron de soporte territorial a estos pueblos en una u otra época de la historia, dado que llegaron a España en el siglo V y la abandonaron en el VIII.
Sus datos indican que en la Hispania romana entraron entre ochenta mil y cien mil visigodos, que configuraron una elite guerrera que se superpuso a una población de, al menos, cuatro o cinco millones de hispano-romanos; y, aunque la ley prohibía matrimonios entre ambos pueblos, la evolución natural de la población avanzó hacia una fusión de ambos pueblos.
Martínez Flórez ha afirmado que, a pesar de todo, cree posible diferenciar un conjunto de necrópolis que parece corresponder a conjuntos militares visigodos que entraron en la Península Ibérica en los primeros años de los siglos V y VI.
Fuente: http://www.adn.es
Fecha: 31/05/2009.
Martínez Flórez, con el apoyo del Museo de La Rioja y de la Cátedra de Historia Antigua de la Universidad riojana, inició este trabajo hace un par de años, que prevé completarlo a lo largo de otros ocho y que consiste en estudiar las características antropológicas de los pueblos germánicos que entraron en España, que fueron, fundamentalmente, los visigodos.Este antropólogo e historiador, en declaraciones a EFE, ha añadido que, para ello, hay que comprender el origen del pueblo godo, su migración del Danubio hasta el Mar Negro a través de Grecia, Italia, Francia y España; así como sus estructuras demográficas en los cuatro reinos que configuró en tierras rusas, italianas, francesas y españolas.
Ha destacado que el análisis antropológico de los restos esqueléticos encontrados en las necrópolis visigodas existentes en España, Francia e Italia y el estudio de los conjuntos cementeriales permitirá desarrollar una hipótesis de trabajo para llenar algunas "lagunas históricas" que existen sobre el pueblo visigodo.
Para el desarrollo de este trabajo ya se han establecido contactos de colaboraciones con las comunidades de Castilla y León, Madrid, Aragón, Cataluña y La Rioja; así como con diversos museos y universidades de España, Francia e Italia.
Esta investigación se enfrenta a la dispersión geográfica de los territorios que sirvieron de soporte territorial a estos pueblos en una u otra época de la historia, dado que llegaron a España en el siglo V y la abandonaron en el VIII.
Sus datos indican que en la Hispania romana entraron entre ochenta mil y cien mil visigodos, que configuraron una elite guerrera que se superpuso a una población de, al menos, cuatro o cinco millones de hispano-romanos; y, aunque la ley prohibía matrimonios entre ambos pueblos, la evolución natural de la población avanzó hacia una fusión de ambos pueblos.
Martínez Flórez ha afirmado que, a pesar de todo, cree posible diferenciar un conjunto de necrópolis que parece corresponder a conjuntos militares visigodos que entraron en la Península Ibérica en los primeros años de los siglos V y VI.
Fuente: http://www.adn.es
Fecha: 31/05/2009.
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